El espectáculo permaneció seis meses en el Espacio
Cultural del Barrio
Martín
Fuentes
Fotos:
Martín Fuentes
La
imagen de Frida Khalo, las infidelidades de Diego Rivera y las canciones de
José Alfredo, más cuentos divertidos y picosos formaron parte del espectáculo
¡Que viva la vida!, que el sábado concluyó temporada en el Espacio Cultural del
Barrio, después de seis meses de representaciones.
Con
la actuación de Nena Pineda, Ángel Trujillo en la guitarra y José Luis de la
Cruz, quien además dirige, la puesta en escena, lo mismo evocó la nostalgia de
los amores mal correspondidos y que sólo se olvidan botella en mano, que la
alegría de vivir.
El espectáculo en un acto se divide en dos partes. En la primera, José Luis de la Cruz demuestra sus dotes de narrador y deleita a
la audiencia con picantes historias como la de los "testículos
comprimidos" o la del niño que quería morir.
La segunda parte, más intensa, presenta a Nena Pineda como Frida, figura
imprescindible del arte y la bohemia en México.
La Frida de Pineda es, sin embargo, menos intelectual y más apasionada. Le
reclama a Diego, sólo representado por un enorme saco café colgado de un
perchero, sus infidelidades mientras ella bebe café en una taza de peltre y
fuma un cigarrillo.
Pineda es una espléndida actriz porque transmite todo el dolor, la frustración
y furia de Frida, incapaz de perdonar las debilidades carnales de Diego, pero
también, sin valor para abandonarlo.
Un
momento en especial, cuando recuerda la escena en la que Lupe Marín, primera
esposa del muralista, levanta a Frida las enaguas y reclama: "¿Y por esta
pata de palo me dejas?", resulta tremendamente emotiva.
Pero como la vida y la muerte de Khalo estuvieron
rodeadas de guitarra y alcohol el final de la puesta en escena, y de la ,
temporada, llegó con canciones como "Un mundo raro" y "El último
trago", cantadas a todo pulmón por artistas y público, entre el que
destacaron Diana Perla Chapa y el comediante El conde de Agualeguas.
Al final Nena Pineda y José Luis De la Cruz
agradecieron la oportunidad de presentar una opción diferente en los escenarios
regiomontanos.
"Originalmente este era un espectáculo sólo
para el Día de Muertos, pero miren estamos casi en el Día de las Madres y aquí
seguimos", dijo la actriz.
De la Cruz agradeció a Javier "Chucho"
Cuéllar la oportunidad y su interés por fomentar la cultura.
Sin embargo, recordó que aunque “¡Que viva la
vida!” terminó el Espacio Cultural del Barrio ofrece cada miércoles el
espectáculo "De muerte y locura" y los viernes son de bohemia sin
alcohol.
El
Espacio Cultural del Barrio está en Diego de Montemayor 1135 en Barrio Antiguo.
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